Caracas, julio 2013. Prensa Antifascista.- Venezuela se caracteriza por tener un alto porcentaje de fuerza de trabajo juvenil, esto se observa en el informe que elabora el Instituto Nacional de Estadística de Venezuela (INE, diciembre 2012). En el mismo se indica que existe una población activa 13.739.312 lo que equivale al 64,5% de la población activa total, de este porcentaje de población activa juvenil, solamente 1.881.009 están ocupado este rango se ubica entre jóvenes de 15 a 24 años. Por otra parte son los más jóvenes quienes representan el mayor número de personas que deciden no trabajar, sino dedicarse a otras actividades, como estudiar, los quehaceres del hogar o se declaran incapacitados para laborar.
Por otra parte, existe un total de inactivos (7.577.545 personas), 42% que tienen entre 15 y 24 años. Así mismo, la tasa de desempleo entre quienes tienen 15 y 24 años cerró en diciembre en 14%, es decir, existen 305.527 jóvenes que están desocupados, cuando hace un año eran 272.284 ciudadanos.
El INE destaca que buena parte aún no ha culminado sus estudios de bachillerato y de educación superior. A esta situación se añaden la exigencia de las empresas públicas y privadas de un determinado tiempo de experiencia para poder contratar a un personal y la falta de políticas que promuevan el empleo joven, ya que por lo general exigen experiencia para obtener fuerza de trabajo calificada, incluso los dirigentes de la derecha hablan de la ley del primer empleo en la cual el sustento básico del mismo, es reducir el monto de los impuestos que deben pagar los empresarios capitalistas a cambio de darle empleo a jóvenes entre 15 y 29 años.
En el esquema del “primer empleo” los empresarios ganarán por vía doble: de una parte, van a ahorrar bajando costos de nómina ya que se les permite pagarles a los jóvenes aprendices un salario de subempleo, y de la otra, por los beneficios tributarios acordados, esto es con la finalidad de tener mano de obra a menor costo, incluso se aprovecha a los jóvenes que están por graduarse y los explotan con las pasantías y los trabajos de grados ya que los patronos usan la excusa que los pasantes “están entrenándose”, para no pagarles salarios.
La población juvenil es de vital importancia para la burguesía y el proletariado, ya que una juventud sin conciencia de clase es la continuidad del capitalismo como modo de producción y además de esto será la futura reserva como fuerza de trabajo. En cambio, una juventud con conciencia de clase es la garantía para derrumbar el capitalismo y además de esto, les permitirá la formación y la incorporación de nuevos cuadros que luchan por construir una nueva sociedad, en Venezuela existe la caracteirtica de que una parte de la población activa es joven. Ahora es deber de los jóvenes revolucionario dirigir la política hacia este sector, para esto es necesaria la organización del joven trabajador.
Se debe generar una política para captar a los jóvenes pasantes y aprendices para que apoyen a los obreros que luchan contra este sistema explotador. También es importante recordar que una parte de los jóvenes desempleados pasan a formar parte de la delincuencia y terminan afectando a los intereses de la clase obrera, puesto que a veces asesinan a los trabajadores para quitarles su salario, demostrando con esto que la delincuencia es producto de la descomposición del sistema capitalista.
Es necesario originar una política organizativa en la población juvenil ocupada, la cual deberá participar en todos los espacios de lucha, tales como los sindicatos clasistas y delegados de prevención, para luchar sus derechos y no dejarse explotar por el burgués, aparte de esto luchar por estudios técnicos en sus medios de trabajo. Los jóvenes revolucionarios deben luchar al lado de los obreros y del campesinado pobre.
Para generar una mayor organización de los jóvenes, es necesario conocer el marco jurídico que afecta nuestro ámbito de acción entre los que se encuentran Ley del Poder Popular para la juventud y la Ley orgánica del trabajo, los trabajadores y trabajadoras a continuación se presentan algunos artículos.
LEY DEL PODER POPULAR PARA LA JUVENTUD.
Artículo 34. El Estado, a través de los ministerios del Poder Popular con
Competencia en la materia, promoverá la educación para el trabajo de los y las jóvenes en todos los niveles y modalidades del sistema educativo, fomentando el desarrollo de sus capacidades y habilidades técnicas y promoviendo su acceso al trabajo productivo, inclusive del joven imputado o la joven imputada, discapacitado o discapacitada, detenido o detenida, penado o penada por la comisión de algún hecho punible.
Artículo 41. El Estado, a través de los órganos con competencia en la materia, promoverá mecanismos para garantizar a los y las jóvenes el derecho al primer empleo, sin que medie la exigencia de experiencia previa como requisito. El Estado desarrollará políticas públicas que permitan fortalecer su formación y capacitación socio productiva, para el desarrollo de una sociedad basada en los principios del trabajo liberador por encima de la acumulación de capital.
Por esta razón los jóvenes desempleados deben organizarse en espacios de lucha para enfrentar el sistema, ya que solamente en una sociedad socialista tendrán mejores condiciones.
En otro orden de ideas, la Ley orgánica del trabajo, los trabajadores y trabajadoras proporciona unas herramientas fundamentales, las cuales se expresan en los siguientes artículos:
De la juventud trabajadora.
Artículo 300. Los jóvenes y las jóvenes tienen el derecho y el deber de ser sujetos activos del proceso de desarrollo nacional. El Estado, con la participación solidaria de la familia y la sociedad creará, oportunidades para estimular su tránsito productivo hacia la vida adulta y en particular para su educación e inclusión en el proceso social de trabajo como estudiante, aprendiz, pasante, becario o becaria, trabajador o trabajadora.
Los jóvenes revolucionarios no deben dejarse desplazar por los jóvenes de la derecha, deben organizarse, movilizarse y formarse de manera permanente para impedir que las fuerzas juveniles pro capitalista avancen con sus propuestas en sectores donde hace vida la juventud, convirtiéndose en instrumento de la burguesía para defender sus intereses; ejemplo de esto, son las protestas que han hecho fuerzas juveniles apoyando la ley neoliberal del primer empleo, propuesta por el partido fascista Primero Justicia. Muchos de esto jóvenes derechistas, son los hijos de los burgueses, que son los dueños de los medios de producción y buscarán toda forma de obtener mano de obra barata, defienden así sus intereses de clase, mientras otros jóvenes que no pertenecen a la burguesía también defienden los intereses de la burguesía, bien sea por confusión o porque son engañados por la maquinaria propagandística de la burguesía. Por eso es necesario recordar a los jóvenes que gran parte de lo logrado desde la lucha por la independencia hasta nuestros días es gracias a la lucha de los sectores revolucionario, luchas y reivindicaciones que posteriormente fueron desviadas por los gobiernos que se plegaron a los intereses de la burguesía. Por eso es necesaria la formación y organización de los jóvenes obreros para que sean la semilla que continúe la luche contra este sistema capitalista.
También existe una deuda de la Asamblea Nacional que está en mora, con la reforma de la Ley del Régimen Prestaciones de Empleo, que llevaría a las empresas a aumentar sus nóminas en 2,5% a través de la contratación de jóvenes. Esta es una lucha de los jóvenes obreros que debemos impulsar para la asamblea nacional apruebe esto y además se debe impulsar para que aumente este porcentaje. Claro está los jóvenes de vemos entender que esto solo será una lucha táctica, de acumulación de fuerzas, pues ningún empleo en el sistema capitalista asegura el bienestar real y duradero de la población juvenil.
En nuestro propósito firme de avanzar al socialismo científico, debemos presentar propuestas teóricas y prácticas para profundizar y radicalizar el proceso bolivariano. El trabajo es el motor transformador de las sociedades cualquiera que estas sean y la juventud es la fuerza que mueve ese motor. Si tenemos una juventud trabajadora sana y con plenos derechos laborales, con buena calidad de vida, profesionalizada y con acceso a la cultura revolucionaria y socialista, nuestro pueblo verá con claridad el transito de la vieja a la nueva sociedad de iguales, sin explotación del hombre por el hombre, el socialismo.
¡Que la crisis la pague la burguesía y no la juventud y los pueblos!
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